Sabine Moreau. | Nieuwsblad.be |
"He visto todo tipo de señales, primero en francés, luego en alemán y finalmente en croata, pero yo continué conduciendo porque iba distraída", relató.
Durante este insólito viaje la mujer paró a repostar dos veces en el camino e incluso sufrió un accidente menor y paró durante unas horas a dormir dentro del vehículo. Sin embargo, en el relato que contó a la policía, que había iniciado su búsqueda tras la denuncia de desaparición de su hijo, asegura que nunca llegó a ser consciente de que iba por el camino equivocado. "Hasta que de repente aparecí en Zagreb y entonces caí en que ya no estaba en Bélgica", dijo. "Reconozco que es un poco raro, pero yo estaba distraída", añadió.